sábado, 27 de julio de 2013



Palabras del Papa Francisco al final del Vía Crucis en la JMJ Rio 2013

JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD 2013


Queridísimos jóvenes 
Hemos venido hoy aquí para acompañar a Jesús a lo largo de su camino de dolor y de amor, el camino de la Cruz, que es uno de los momentos fuertes de la Jornada Mundial de la Juventud. Al concluir el Año Santo de la Redención, el beato Juan Pablo II quiso confiarles a ustedes, jóvenes, la Cruz diciéndoles: “Llévenla por el mundo como signo del amor de Jesús a la humanidad, y anuncien a todos que sólo en Cristo muerto y resucitado hay salvación y redención” (Palabras al entregar la cruz del Año Santo a los jóvenes, 22 de abril de 1984: Insegnamenti VII,1 (1984), 1105). 

Desde entonces, la Cruz ha recorrido todos los continentes y ha atravesado los más variados mundos de la existencia humana, quedando como impregnada de las situaciones vitales de tantos jóvenes que la han visto y la han llevado. Nadie puede tocar la Cruz de Jesús sin dejar en ella algo de sí mismo y sin llevar consigo algo de la cruz de Jesús a la propia vida. 

Esta tarde, acompañando al Señor, me gustaría que resonasen en sus corazones tres preguntas: ¿Qué han dejado ustedes en la Cruz, queridos jóvenes de Brasil, en estos dos años en los que ha recorrido su inmenso país? Y ¿qué ha dejado la Cruz en cada uno de ustedes? Y, finalmente, ¿qué nos enseña para nuestra vida esta Cruz? 1. Una antigua tradición de la Iglesia de Roma cuenta que el apóstol Pedro, saliendo de la ciudad para huir de la persecución de Nerón, vio que Jesús caminaba en dirección contraria y enseguida le preguntó: “Señor, ¿adónde vas?”. 

La respuesta de Jesús fue: “Voy a Roma para ser crucificado de nuevo”. En aquel momento, Pedro comprendió que tenía que seguir al Señor con valentía, hasta el final, pero entendió sobre todo que nunca estaba solo en el camino; con él estaba siempre aquel Jesús que lo había amado hasta morir en la Cruz. Miren, Jesús con su Cruz recorre nuestras calles para cargar con nuestros miedos, nuestros problemas, nuestros sufrimientos, también los más profundos. 

Con la Cruz, Jesús se une al silencio de las víctimas de la violencia, que no pueden ya gritar, sobre todo los inocentes y los indefensos; con ella, Jesús se une a las familias que se encuentran en dificultad, que lloran la trágica pérdida de sus hijos, como en el caso de los 242 jóvenes víctimas en el incendio de la ciudad de Santa María en el incendio de este año recemos por ellos. O que sufren al verlos víctimas de paraísos artificiales como la droga; con ella, Jesús se une a todas las personas que sufren hambre en un mundo que cada día tira toneladas de alimentos; con ella, Jesús se une a quien es perseguido por su religión, por sus ideas, o simplemente por el color de su piel; en ella, Jesús se une a tantos jóvenes que han perdido su confianza en las instituciones políticas porque ven el egoísmo y la corrupción, o que han perdido su fe en la Iglesia, e incluso en Dios, por la incoherencia de los cristianos y de los ministros del Evangelio. 

En la Cruz de Cristo está el sufrimiento, el pecado del hombre, también el nuestro, y Él acoge todo con los brazos abiertos, carga sobre su espalda nuestras cruces y nos dice: ¡Ánimo! No la llevas tú solo. Yo la llevo contigo y yo he vencido a la muerte y he venido a darte esperanza, a darte vida (cf. Jn 3,16). 2. Y así podemos responder a la segunda pregunta: ¿Qué ha dejado la Cruz en los que la han visto, en los que la han tocado? ¿Qué deja en cada uno de nosotros? Deja un bien que nadie más nos puede dar: la certeza del amor indefectible de Dios por nosotros. 

Un amor tan grande que entra en nuestro pecado y lo perdona, entra en nuestro sufrimiento y nos da fuerza para sobrellevarlo, entra también en la muerte para vencerla y salvarnos. 

En la Cruz de Cristo está todo el amor de Dios, su inmensa misericordia. Y es un amor del que podemos fiarnos, en el que podemos creer. Queridos jóvenes, fiémonos de Jesús, confiemos totalmente en Él (cf. Lumen fidei, 16). porque Él nunca defrauda a nadie. 

Solo en Cristo muerto y resucitado encontramos salvación y redención. Con Él, el mal, el sufrimiento y la muerte no tienen la última palabra, porque Él nos da esperanza y vida: ha transformado la Cruz de ser instrumento de odio, de derrota, de muerte, en un signo de amor, de victoria y de vida. El primer nombre de Brasil fue precisamente “Terra de Santa Cruz”. La Cruz de Cristo fue plantada no sólo en la playa hace más de cinco siglos, sino también en la historia, en el corazón y en la vida del pueblo brasileño, y en muchos otros. 

A Cristo que sufre lo sentimos cercano, uno de nosotros que comparte nuestro camino hasta el final. No hay en nuestra vida cruz, pequeña o grande, que el Señor no comparta con nosotros. 3. Pero la Cruz nos invita también a dejarnos contagiar por este amor, nos enseña así a mirar siempre al otro con misericordia y amor, sobre todo a quien sufre, a quien tiene necesidad de ayuda, a quien espera una palabra, un gesto, y a salir de nosotros mismos para ir a su encuentro y tenderles la mano. Muchos rostros han acompañado a Jesús en su camino al Calvario: Pilato, el Cireneo, María, las mujeres… 

También nosotros podemos ser para los demás como Pilato, que no tiene la valentía de ir contracorriente para salvar la vida de Jesús y se lava las manos. 

Queridos amigos, la Cruz de Cristo nos enseña a ser como el Cireneo, que ayuda a Jesús a llevar aquel madero pesado, como María y las otras mujeres, que no tienen miedo de acompañar a Jesús hasta el final, con amor, con ternura. Y tú, ¿como quién eres? ¿Como Pilato, como el Cireneo, como María? 

Jesús te está mirando ahora y te dice ¿Me quieres ayudar a llevar la cruz? Queridos jóvenes, llevemos nuestras alegrías, nuestros sufrimientos, nuestros fracasos a la Cruz de Cristo; encontraremos un Corazón abierto que nos comprende, nos perdona, nos ama y nos pide llevar este mismo amor a nuestra vida, amar a cada hermano o hermana nuestra con ese mismo amor. Que así sea.

JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD 2013



(Diogo Ximenes/InfoCatólica) El Papa recordó que hoy se celebra la memoria de un santo matrimonio, «abuelos» de Jesús, los santos Joaquín y Ana, y los puso como ejemplo de servicio a la vida y a la fe, como modelo para las viejas generaciones, que hoy son tratadas como «descartables».
«En su casa vino al mundo María, trayendo consigo el extraordinario misterio de la Inmaculada Concepción; en su casa creció acompañada por su amor y su fe; en su casa aprendió a escuchar al Señor y a seguir su voluntad», explicó.
Apuntó que los santos Joaquín y Ana forman parte de esa larga cadena que ha transmitido el amor de Dios en el calor que sólo da la familia, hasta llegar a María «que acogió en su seno al hijo de Dios y lo dio al mundo, nos lo ha dado a nosotros».
A través de esta corriente generacional aconteció lo que - dijo- es un acontecimiento luminoso que ha transformado la historia: «la Encarnación, el hijo de Dios se ha hecho hombre en Jesús de Nazareth».
Citando el Documento de Aparecida señaló que «niños y ancianos construyen el futuro de los pueblos, los niños porque llevarán adelante la historia, los ancianos porque nos transmiten la experiencia y la sabiduría de su vida».
Para el Obispo de Roma el dialogo intergeneracional es un tesoro que se debe preservar y alimentar y dijo a miles de fieles - sobre todo adultos - que se congregaron a escucharlo bajo el balcón del Palacio Arzobispal - que lleva el nombre de San Joaquin - que en esta Jornada Mundial de la Juventud los jóvenes quieren saludar a los abuelos.
El dialogo entre generaciones fue también abordado ayer por el Pontífice en el encuentro con los peregrinos argentinos, en la Catedral Metropolitana:
«Yo les pido de corazón a los ancianos: no claudiquen de ser la reserva cultural de nuestro pueblo que trasmite la justicia, que trasmite la historia, que trasmite los valores, que trasmite la memoria del pueblo. Y ustedes (jóvenes), por favor, no se metan contra los viejos; déjenlos hablar, escúchenlos, y lleven adelante. Pero sepan, sepan que, en este momento, ustedes, los jóvenes, y los ancianos, están condenados al mismo destino: exclusión; no se dejen excluir. ¿Está claro? Por eso, creo que tienen que trabajar juntos».

JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD 2013



(Agencias/InfoCatólica) El Santo Padre empezó su discurso reconociendo que la vida de un obispo puede llenarse de precoupaciones por tener que tratar multitud de asuntos, pero alertó contra el peligro de que los pastores caigan en la tristeza: «A veces, la vida de un obispo tiene dificultades y la fe del obispo puede entristecerse. ¡Qué feo es un obispo triste! ¡Qué feo que es!».
Francisco advirtió que hoy en día las personas tienen «la tentación» de «ponerse en el centro», de creer que cada uno construye su vida o que «es el tener, el dinero, el poder lo que da la felicidad». Sin embargo, ha indicado que estos pueden ofrecer «un momento de embriaguez, la ilusión de ser felices» pero, al final, «dominan y llevan a querer tener cada vez más, a no estar nunca satisfechos».
«Y terminamos empachados pero no alimentados. Y es muy triste ver a una juventud empachada pero débil. La juventud tiene que ser fuerte, debe alimentarse de su fe, no empacharse de otras cosas», ha añadido de forma improvisada.
Además, ha asegurado que la fe lleva a cabo en la vida de cada persona «una revolución que se podría llamar copernicana», porque «quita a la persona del centro y pone en él a Dios, de forma que el modo de pensar y obrar se transforma en el mismo de Jesús y el corazón se llena de paz, dulzura, ternura, entusiasmo, serenidad y alegría».
Por ello, el papa Francisco ha invitado a los jóvenes a poner «fe, esperanza y amor» a su vida, al igual que ponen sal a un plato soso, para que «realmente tenga sentido y sea plena, como desean y merecen».
«Pon fe y tu vida tendrá un sabor nuevo, tendrá una brújula que te indicará la dirección; pon esperanza y cada día de tu vida estará iluminado y tu horizonte no será ya oscuro, sino luminoso; pon amor y tu existencia será como una casa construida sobre la roca, tu camino será gozoso, porque encontrarás tantos amigos que caminan contigo», ha explicado.
«Pero, ¿quién puede darnos esto?», se ha preguntado para contestar que es Cristo. Por ello, ha exhortado a la juventud a «poner a Cristo» en su vida. «Pon a Cristo en tu vida y encontrarás un amigo del que fiarte siempre; pon a Cristo y verás crecer las alas de la esperanza para recorrer con alegría el camino del futuro; pon a Cristo y tu vida estará llena de su amor, será una vida fecunda», ha añadido.
El Papa ha dicho a los jóvenes que Cristo les «espera en el encuentro con su Carne en la Eucaristía, Sacramento de su presencia, de su sacrificio de amor, y en la humanidad de tantos jóvenes que te enriquecerán con su amistad, te animarán con su testimonio de fe, te enseñarán el lenguaje de la caridad, de la bondad, del servicio».
De nuevo, improvisando ha preguntado a los jóvenes: «¿Estás dispuesto a entrar en esta onda de la revolución de la fe?». Y les ha indicado que solo así su vida va a tener sentido.
Además, ha recordado a los jóvenes que sí ponen a Jesús en su vida, él les acogerá «para curar, con su misericordia, las heridas del pecado». «No tengas miedo de pedir perdón. Él no se cansa nunca de perdonarnos, como un padre que nos ama. ¡Dios es pura misericordia!», ha insistido.
Finalmente, el Papa Francisco ha invitado a encontrar en los otros jóvenes el «lenguaje de la caridad, de la bondad, del servicio» y ha llamado a cada uno a ser «un testigo gozoso de su amor, un testigo entusiasta de su Evangelio para llevar un poco de luz a este mundo». «Qué bien se está aquí», ha exclamado recordando las palabras de Pedro después de haber visto al Señor Jesús transfigurado, revestido de gloria.

JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD 2013



De entre las 400 familias que viven en Varguinha, una de las favelas que integran el Complejo de Manguinhos, hasta hace nueve meses de los lugares más peligrosos y afectados por el tráfico armado en Río de Janeiro, la casa de María Lucía fue la escogida por el Papa, este jueves, para entrar unos minutos y repartir bendiciones.
"Fue una sorpresa muy grande que yo misma ni sabía. Mi responsabilidad aumentó mucho, como madre, como esposa, como abuela y como misionaria", explica a ELMUNDO.es una emocionada María, tras el encuentro.
En una sala de apenas nueve metros cuadrados con dos sofás y estanterías llenas de globos blancos y amarillos, en homenaje a los colores de la bandera del Vaticano, Francisco se dirigió en 'portuñol' a esta familia, dio a todos la mano y se mostró cariñoso con la pequeña Olivia de dos años, nieta de María. Durante la visita, los atónitos allí presentes que no imaginaban tener al Santo Pontífice dentro de su vivienda, aprovecharon para sacar fotos del momento.
Para esta mujer que no ha querido revelar su edad, la visita del Papa "cambia mucho la vida de los jóvenes de la comunidad porque ayuda a que no caigan en la droga o en la prostitución".
Nada más entrar en Varguinha, Francisco ha bajado del Papamóvil, momento en el que le han entregado un collar verde, amarillo, azul y blanco con el que ha continuado a pié el trayecto previsto, durante el cual ha sido aclamado por una calurosa multitud. Muchos como Teresa Marques de 65 años, le esperaban desde antes de salir el sol.
"Fue algo muy bueno, nunca pensé ver el Papa en una comunidad de personas carentes", señala Teresa.
La favela de Manguinhos, conocida antaño como la Franja de Gaza, debido a su violencia y el abandono a la que la condenaron por ser uno de los puntos de la ciudad más afectados por el narcotráfico armado, fue ocupada por policías y militares en octubre del año pasado, inaugurando una nueva era aunque no exenta de dificultades.
El 'Papa de los pobres' se ha referido a ellas en su discurso: "Ningún esfuerzo de pacificación será duradero, ni habrá armonía ni felicidad para una sociedad que ignora y deja al margen, en la periferia, parte de sí misma".
Desde 2008, las autoridades de Río de Janeiro llevan a cabo su plan más ambicioso que consiste en "pacificar" las favelas, es decir, eliminar la presencia de armas con vigilancia policial e implementar una agenda social que permita el acceso a los servicios básicos.

JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD 2013



RIO DE JANEIRO, 25 Jul. 13 / 05:33 pm (ACI).- Queridos jóvenes:

"Qué bien se está aquí", exclamó Pedro, después de haber visto al Señor Jesús transfigurado, revestido de gloria. ¿Podríamos repetir también nosotros esas palabras? Pienso que sí, porque para todos nosotros, hoy, es bueno estar aquí reunidos en torno a Jesús. Él es quien nos acoge y se hace presente en medio de nosotros, aquí en Río. Pero en el Evangelio también hemos escuchado las palabras del Padre: "Éste es mi Hijo, el escogido, escuchadle" (Lc 9,35).

Por tanto, si por una parte es Jesús el que nos acoge; por otra, también nosotros hemos de acogerlo, ponernos a la escucha de su palabra, porque precisamente acogiendo a Jesucristo, Palabra encarnada, es como el Espíritu nos transforma, ilumina el camino del futuro, y hace crecer en nosotros las alas de la esperanza para caminar con alegría (cf. Carta enc. Lumen fidei, 7).

Pero, ¿qué podemos hacer? "Bota fé – Pon fe". La cruz de la Jornada Mundial de la Juventud ha gritado estas palabras a lo largo de su peregrinación por Brasil. ¿Qué significa "Pon fe"? Cuando se prepara un buen plato y ves que falta la sal, "pones" sal; si falta el aceite, "pones" aceite… "Poner", es decir, añadir, echar.

Lo mismo pasa en nuestra vida, queridos jóvenes: si queremos que tenga realmente sentido y sea plena, como ustedes desean y merecen, les digo a cada uno y a cada una de ustedes: "pon fe" y tu vida tendrá un sabor nuevo, tendrá una brújula que te indicará la dirección; "pon esperanza" y cada día de tu vida estará iluminado y tu horizonte no será ya oscuro, sino luminoso; "pon amor" y tu existencia será como una casa construida sobre la roca, tu camino será gozoso, porque encontrarás tantos amigos que caminan contigo. ¡Pon fe, pon esperanza, pon amor!

Pero, ¿quién puede darnos esto? En el Evangelio hemos escuchado la respuesta:  Cristo. "Éste es mi Hijo, el escogido, escuchadle". Jesús es quien nos trae a Dios y nos lleva a Dios, con él toda nuestra vida se transforma, se renueva y nosotros podemos ver la realidad con ojos nuevos, desde el punto de vista de Jesús, con sus mismos ojos (cf. Carta enc. Lumen fidei, 18).

Por eso hoy les digo con fuerza: "Pon a Cristo" en tu vida y encontrarás un amigo del que fiarte siempre; "pon a Cristo" y verás crecer las alas de la esperanza para recorrer con alegría el camino del futuro; "pon a Cristo" y tu vida estará llena de su amor, será una vida fecunda.

Hoy me gustaría que todos nos preguntásemos sinceramente: ¿en quién ponemos nuestra fe? ¿En nosotros mismos, en las cosas, o en Jesús? Tenemos la tentación de ponernos en el centro, de creer que nosotros solos construimos nuestra vida, o que es el tener, el dinero, el poder lo que da la felicidad. Pero no es así.

El tener, el dinero, el poder pueden ofrecer un momento de embriaguez, la ilusión de ser felices, pero, al final, nos dominan y nos llevan a querer tener cada vez más, a no estar nunca satisfechos, y terminamos empachados, pero no alimentados y es muy triste ver una juventud empachada, pero débil. La juventud tiene que ser fuerte, alimentarse de su fe y no empacharse de otras cosas”. 

¡"Pon a Cristo" en tu vida, pon tu confianza en él y no quedarás defraudado! Miren, queridos amigos, la fe lleva a cabo en nuestra vida una revolución que podríamos llamar copernicana, porque nos quita del centro y pone en él a Dios; la fe nos inunda de su amor que nos da seguridad, fuerza, esperanza. Aparentemente no cambia nada, pero, en lo más profundo de nosotros mismos, todo cambia.

En nuestro corazón habita la paz, la dulzura, la ternura, el entusiasmo, la serenidad y la alegría, que son frutos del Espíritu Santo (cf. Ga 5,22) y nuestra existencia se transforma, nuestro modo de pensar y de obrar se renueva, se convierte en el modo de pensar y de obrar de Jesús, de Dios. En el Año de la Fe, esta Jornada Mundial de la Juventud es precisamente un don que se nos da para acercarnos todavía más al Señor, para ser sus discípulos y sus misioneros, para dejar que él renueve nuestra vida.

Querido joven, querida joven: "Pon a Cristo" en tu vida. En estos días, Él te espera en su Palabra; escúchalo con atención y su presencia enardecerá tu corazón. "Pon a Cristo": Él te acoge en el Sacramento del perdón, para curar, con su misericordia, las heridas del pecado. No tengas miedo de pedir perdón. Él no se cansa nunca de perdonarnos, como un padre que nos ama.

¡Dios es pura misericordia! "Pon a Cristo": Él te espera en el encuentro con su Carne en la Eucaristía, Sacramento de su presencia, de su sacrificio de amor, y en la humanidad de tantos jóvenes que te enriquecerán con su amistad, te animarán con su testimonio de fe, te enseñarán el lenguaje de la caridad, de la bondad, del servicio. También tú, querido joven, querida joven, puedes ser un testigo gozoso de su amor, un testigo entusiasta de su Evangelio para llevar un poco de luz a este mundo nuestro.

"Qué bien se está aquí", poniendo a Cristo, la fe, la esperanza, el amor que él nos da, en nuestra vida. Queridos amigos, en esta celebración hemos acogido la imagen de Nuestra Señora de Aparecida. Con María, queremos ser discípulos y misioneros. Como ella, queremos decir "sí" a Dios. Pidamos a su Corazón de Madre que interceda por nosotros, para que nuestros corazones estén dispuestos a amar a Jesús y a hacerlo amar. ¡Él nos espera y cuenta con nosotros! Amén.

SOPLA EL VIENTO, HOMENAJE A LAS VÍCTIMAS DEL ACCIDENTE EN SANTIAGO DE COMPOSTELA

PRIMER DISCURSO DEL PAPA EN LA JMJ 2013



RIO DE JANEIRO, 22 Jul. 13 / 04:24 pm (ACI/EWTN Noticias).- “No tengo oro ni plata, pero traigo conmigo lo más valioso que se me ha dado: Jesucristo”, afirmó el Papa Francisco en su primer discurso en tierras latinoamericanas. Desde el Palacio de Guanabara (Brasil), donde se reúne con la presidenta Dilma Rousseff, afirmó que llega para en nombre de Cristo, “alimentar la llama de amor fraterno que arde en todo corazón”.

El Papa Francisco llegó este lunes a Río de Janeiro (Brasil), para participar en la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) y encontrarse con cientos de miles de jóvenes de todo el mundo.

“Dios ha querido que el primer viaje internacional de mi pontificado me ofreciera la oportunidad de volver a la amada América Latina, concretamente a Brasil”, afirmó el Santo Padre en su discurso leído en portugués, en el que recordó los estrechos lazos que unen a este país con la Sede Apostólica, así como los “profundos sentimientos de fe y amistad” que siempre han mantenido a esta nación “unida de una manera especial al Sucesor de Pedro”.

“He aprendido que, para tener acceso al pueblo brasileño, hay que entrar por el portal de su inmenso corazón; permítanme, pues, que llame suavemente a esa puerta. Pido permiso para entrar y pasar esta semana con ustedes”, añadió el Papa, que durante el trayecto al palacio de Guanabara fue saludado efusivamente por la población que se volcó a las calles.

En su discurso, Francisco también agradeció la acogida de las autoridades brasileñas y su afecto a los obispos. “Con esta visita, deseo continuar con la misión pastoral propia del Obispo de Roma de confirmar a sus hermanos en la fe en Cristo, alentarlos a dar testimonio de las razones de la esperanza que brota de él, y animarles a ofrecer a todos las riquezas inagotables de su amor”, afirmó.

El Santo Padre destacó que el objetivo principal es encontrarse con los cientos de miles de peregrinos que participarán en la JMJ, “atraídos por los brazos abiertos de Cristo Redentor” donde buscan “un refugio” y “volver a escuchar su llamada clara y potente: ‘Vayan y hagan discípulos a todas las naciones’”.

“Cristo les ofrece espacio, sabiendo que no puede haber energía más poderosa que esa que brota del corazón de los jóvenes cuando son seducidos por la experiencia de la amistad con él. Cristo tiene confianza en los jóvenes y les confía el futuro de su propia misión: ‘Vayan y hagan discípulos’; vayan más allá de las fronteras de lo humanamente posible, y creen un mundo de hermanos y hermanas. Pero también los jóvenes tienen confianza en Cristo: no tienen miedo de arriesgar con él la única vida que tienen, porque saben que no serán defraudados”, afirmó.

Francisco dijo que al dirigirse a los jóvenes “hablo también a sus familias, sus comunidades eclesiales y nacionales de origen, a las sociedades en las que viven, a los hombres y mujeres de los que depende en gran medida el futuro de estas nuevas generaciones”.

“Es común entre ustedes oír decir a los padres: ‘Los hijos son la pupila de nuestros ojos’. ¡Qué hermosa es esta expresión de la sabiduría brasileña, que aplica a los jóvenes la imagen de la pupila de los ojos, la abertura por la que entra la luz en nosotros, regalándonos el milagro de la vista! ¿Qué sería de nosotros si no cuidáramos nuestros ojos? ¿Cómo podríamos avanzar? Mi esperanza es que, en esta semana, cada uno de nosotros se deje interpelar por esta pregunta provocadora”, añadió.

Francisco señaló que los jóvenes esperan que se les ofrezcan “las condiciones materiales y espirituales para su pleno desarrollo (…), para que llegue a ser lo que puede ser”. Necesitan que se les asegure “un horizonte trascendente para su sed de auténtica felicidad”.

Finalmente, pidió establecer “un diálogo entre amigos”. “En este momento, los brazos del Papa se alargan para abrazar a toda la nación brasileña, en el complejo de su riqueza humana, cultural y religiosa”.

“Que desde la Amazonia hasta la pampa, desde las regiones áridas al Pantanal, desde los pequeños pueblos hasta las metrópolis, nadie se sienta excluido del afecto del Papa. Pasado mañana, si Dios quiere, tengo la intención de recordar a todos ante Nuestra Señora de Aparecida, invocando su maternal protección sobre sus hogares y familias. Y, ya desde ahora, los bendigo a todos. Gracias por la bienvenida”, culminó el Papa.

JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD 2013


¡Oh Padre! enviaste a Tu Hijo Eterno para salvar el mundo y elegiste hombres y mujeres para que, por Él, con Él y en Él proclamaran la Buena Noticia a todas las naciones. Concede las gracias necesarias para que brille en el rostro de todos los jóvenes la alegría de ser, por la fuerza del Espíritu, los evangelizadores que la Iglesia necesita en el Tercer Milenio. 

¡Oh Cristo! Redentor de la humanidad, Tu imagen de brazos abiertos en la cumbre del Corcovado acoge a todos los pueblos. En Tu ofrecimiento pascual, nos condujiste por medio del Espíritu Santo al encuentro filial con el Padre. Los jóvenes, que se alimentan de la Eucaristía, Te oyen en la Palabra y Te encuentran en el hermano, necesitan Tu infinita misericordia para recorrer los caminos del mundo como discípulos misioneros de la nueva evangelización.

¡Oh Espíritu Santo! Amor del Padre y del Hijo, con el esplendor de Tu Verdad y con el fuego de Tu amor, envía Tu Luz sobre todos los jóvenes para que, impulsados por la Jornada Mundial de la Juventud, lleven a los cuatros rincones del mundo la fe, la esperanza y la caridad, convirtiéndose en grandes constructores de la cultura de la vida y de la paz y los protagonistas de un nuevo mundo.

¡Amén!

REDACCIÓN CENTRAL, 19 Jul. 13 / 01:07 pm (ACI).- Gracias a la señal de EWTN, el canal católico de televisión más grande del mundo, ACI Prensa transmitirá en vivo y en su sitio web los eventos más importantes de la Jornada Mundial de la Juventud (JMJ) Río 2013.

La cobertura televisiva en directo comenzará el lunes 22 de julio, con la Ceremonia de Bienvenida al Papa Francisco en los jardines del Palacio Guanabara, en Río de Janeiro, que podrá ser sintonizada desde la 1:30 p.m. en México, Lima (Perú) y Bogotá (Colombia). En Madrid (España) podrán ver esta ceremonia desde las 8:30 p.m.
La repetición se emitirá el mismo día a las 7:00 p.m. para México, Lima y Bogotá, mientras que se realizará a las 2:00 a.m. del 23 de julio para Madrid.

El 23 de julio se realizará la Misa de Inauguración de la JMJ, que será transmitida desde las 4:30 p.m. para México, Bogotá y Lima, mientras que para Madrid, el evento podrá ser sintonizado desde las 11:30 p.m.
La repetición de la Misa será emitida desde las 11:00 p.m. del mismo día para México, Lima y Bogotá, mientras que Madrid la podrá sintonizar a las 6:00 a.m. del 24 de julio.

La Santa Misa en la Basílica del Santuario de Nuestra Señora de la Concepción, en Aparecida, que presidirá el Papa Francisco el 24 de julio, se transmitirá para México, Lima y Bogotá a las 7:30 a.m. y para Madrid a las 2:30 p.m.
La repetición de este evento se podrá ver a las 8:00 p.m. en México, Lima y Bogotá, mientras que Madrid lo podrá sintonizar desde las 3:00 a.m. del 25 de julio.

En la tarde del 24 de julio, Francisco visitará el Hospital de San Francisco de Asís de la Providencia, lo que podrá ser visto en vivo desde las 4:00 p.m. en México, Lima y Bogotá, mientras que Madrid podrá verlo desde las 11:00 p.m.
La repetición será emitida a las 2:00 a.m. del 25 de julio para México, Lima y Bogotá, y a las 9:00 a.m. de ese día para Madrid.

La visita del Santo Padre a la comunidad de Varginha el 25 de julio será transmitida desde las 7:30 a.m. para México, Lima y Bogotá, mientras que en Madrid se podrá ver desde las 2:30 p.m.
La repetición estará disponible desde las 8:00 p.m. para México, Lima y Bogotá, y a las 3:00 a.m. del 26 de julio para Madrid.

La Fiesta de acogida de los jóvenes en el paseo marítimo de Copacabana, el 25 de julio, se transmitirá desde las 3:30 p.m. para México, Lima y Bogotá. Madrid podrá sintonizar este evento en vivo desde las 10:30 p.m.
La repetición se podrá ver el 26 de julio desde las 2:00 a.m. para México, Lima y Bogotá; y a las 9:00 a.m. para Madrid.

El rezo del Ángelus desde el balcón central del palacio arzobispal de San Joaquín, programado para el 26 de julio, se transmitirá a las 9:30 a.m. para México, Lima y Bogotá; y a las 4:30 p.m. para Madrid.

El Vía Crucis programado para ese mismo día, podrá ser visto desde las 3:30 p.m. para México, Lima y Bogotá y a las 10:30 p.m. en Madrid.
La repetición del Vía Crucis se transmitirá a las 8:00 p.m. en México, Lima y Bogotá, mientras que Madrid podrá sintonizarlo desde las 3:00 a.m. del 27 de julio.

El 27 de julio se celebrará la Santa Misa en la catedral de San Sebastián, que se transmitirá desde las 6:30 a.m. para México, Lima y Bogotá. Madrid podrá sintonizar el evento desde la 1:30 p.m.
La repetición de la Misa se podrá ver a las 8:00 p.m. en México, Lima y Bogotá, y a las 3:00 a.m. del 28 de julio en Madrid.

El mismo 27 de julio se realizará el encuentro del Papa con la clase dirigente de Brasil en el Teatro Municipal, que se transmitirá desde las 9:30 a.m. para México, Lima y Bogotá. En Madrid se podrá ver desde las 4:30 p.m.
La repetición de este encuentro estará disponible desde las 11:00 p.m. para México, Lima y Bogotá, mientras que Madrid lo podrá sintonizar desde las 6:00 a.m. del 28 de julio.

El 27 de julio también tendrá lugar la Vigilia de oración con los jóvenes en el Campus Fidei, que se transmitirá desde las 5:00 p.m. para México, Lima y Bogotá. Madrid podrá sintonizar el evento desde las 12:00 a.m. del 28 de julio.
La repetición se realizará el 28 de julio desde las 2:00 a.m. en México, Lima y Bogotá, y a las 9:00 a.m. en Madrid.

La Misa de envío, el 28 de julio, se transmitirá a las 7:30 a.m. en México, Lima y Bogotá; y a las 2:30 p.m. en Madrid.
La repetición será a las 8:00 p.m. para México, Lima y Bogotá; y a las 3:00 a.m. del 29 de julio para Madrid.

También el 28 de julio, el encuentro del Papa con los voluntarios de la JMJ Río 2013 se transmitirá a las 3:00 p.m. en México, Lima y Bogotá. Madrid podrá sintonizar el evento a las 10:00 p.m.
La repetición del encuentro con los voluntarios se transmitirá el 29 de julio desde las 2:00 a.m. para México, Lima y Bogotá; y a las 9:00 a.m. para Madrid

JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD 2013

La cruz de la JMJ quedó conocida con diferentes nombres: Cruz del Año Santo, Cruz del Jubileo, Cruz de la JMJ, Cruz Peregrina, y muchos la llaman Cruz de los Jóvenes porque ella fue entregada por el Papa Juan Pablo II a los jóvenes para que éstos la llevasen por todo el mundo, a todo los lugares y todo el tiempo.

La cruz de madera de 3,8 metros fue construida y colocada como símbolo de la fe católica, cerca del altar principal en la Basílica de San Pedro durante el Año Santo de la Redención (desde la Semana Santa de 1983 hasta la Semana Santa de 1984). Al finalizar aquel año, después de cerrar la Puerta Santa, el Papa Juan Pablo II dio esa cruz como un símbolo del amor de Cristo por la humanidad. Quienes la recibieron, en nombre de toda la juventud, fueron los jóvenes del Centro Juvenil Internacional San Lorenzo, en Roma). Éstas fueron las palabras del Papa en aquella oportunidad: "Mis queridos jóvenes, al concluir el Año Santo, yo les confío a ustedes el signo de este Año Jubilar: ¡la Cruz de Cristo! Llévenla por el mundo como una señal, como un símbolo del amor de Cristo por la humanidad, y anuncien a todos que solamente en la muerte y en la resurrección de Cristo podemos encontrar la salvación y la redención" (Su Santidad Juan Pablo II, Roma, 22 de abril de 1984).

Los jóvenes acogieron el deseo del Santo Padre. Desde 1984, la cruz de la JMJ peregrinó por el mundo, a través de Europa, más allá de la Cortina de Hierro, y hacia pueblos y localidades de las Américas, Asia, África y Australia, estando presente en cada celebración internacional de la Jornada Mundial de la Juventud. En 1994, la cruz comenzó un compromiso que, desde entonces, se convirtió en una tradición: su jornada anual por la diócesis del país sede de cada JMJ internacional, como un medio de preparación espiritual para el gran evento.

El Vía Crucis que se celebrará en la Jornada Mundial de la Juventud en Río de Janeiro, exactamente el día 26 de julio, tratará los sufrimientos de Jesús haciendo una metáfora con los problemas de la juventud de hoy. Serán 14 estaciones de las cuales 13 se representarán en la zona de la Avenida Atlántico de la ciudad, en unos 900 metros, y la última será en el escenario principal, donde estará el Papa Francisco. Participarán 280 personas y el evento durará una hora y cuarto. 

La misión de conversión, las comunidades, las madres jóvenes, los seminaristas, la religión en la defensa de la vida, las parejas, las mujeres que sufren, los estudiantes, las redes sociales, los reclusos, enfermedades terminales, la muerte de los jóvenes, serán algunos de las cuestiones que se tratan en las estaciones.

“Este Via Crucis, dice el Director Artístico del evento, Ravel Cabral, se creó para hablar a los jóvenes, así como todavía hoy nos habla el camino doloroso que hizo Jesús. El Camino de la Cruz es también un mensaje de solidaridad. Queremos no sólo hablar de las dificultades de los niños, asegura Cabral, sino también fomentar el espíritu de los jóvenes a actuar juntos en Cristo “. (MZ-RV)

JORNADA MUNDIAL DE LA JUVENTUD 2013

El lema de la JMJ Río2013 convoca a los jóvenes de Brasil y del mundo entero a asumir el llamado hacia la misión, a ser testigos vivos de Cristo Resucitado.

Tomado de la parte final del Evangelio de San Mateo, el lema tiene como contexto la Resurrección de Cristo. Los discípulos, quienes hasta ese momento se encontraban atemorizados y encerrados con miedo de los judíos, se encuentran con el Cristo, vencedor de la muerte.

El encuentro con el Resucitado impulsa a todos a vivir este mandato. ¡María Magdalena ve el sepulcro vacío y testifica! ¡Pedro y Juan ven las vendas y la sábana, creen y testifican! ¡Los discípulos de Emaús reconocen a Cristo al partir el Pan y testifican que Cristo vive!

Y es en ese contexto que Cristo da el mandato: ¡Id! ¡Id porque Él está vivo y camina delante de sus amigos! ¡Id porque Cristo es vencedor y permanece con cada miembro de la Iglesia! ¡Id a anunciar la Resurrección!

Es esto lo que intenta generar el lema de la JMJ Río2013 en el corazón de cada joven peregrino. Motiva a que cada peregrino deje que la luz de Cristo Resucitado disipe las tinieblas del miedo y de las dudas que paralizan. Estimula a que los jóvenes sean misioneros aún en situaciones de conflicto, en países donde los cristianos son perseguidos, en medio a un mundo secularizado que no quiere vivir los valores cristianos.

Por lo tanto, éste es un mandato de la Iglesia a la juventud católica. ¡Id, jóvenes misioneros que confiáis en el Magisterio de la Iglesia y que apoyáis vuestra fe en la liturgia y en la vida comunitaria! ¡Id y evangelizad con vuestros dones personales! ¡Id y fundamentad vuestra fe con respuestas y justificaciones sobre temas que afligen al mundo actual! ¡Id y testificad la alegría del encuentro con el Cristo Resucitado en la JMJ Río2013!
Posted: 18 Jul 2013 02:22 PM PDT
Ciudad del Vaticano, 17 julio 2013 (VIS).-El director de la Oficina de Prensa de la Santa Sede, Padre Federico Lombardi S.I., ha informado esta mañana en esa sede del inminente viaje apostólico del Papa Francisco a Río de Janeiro para la XXVIII Jornada Mundial de la Juventud. El Padre Lombardi ha pasado revista al programa del Pontífice durante la semana que transcurrirá en Brasil explicando que se trata de un viaje “particularmente significativo en su continente y esto le otorga, naturalmente, un tono especial por cuanto respecta a las expectativas y a la participación”.

“Cómo sabemos – ha proseguido- la decisión de efectuar su primer viaje a América Latina no fue suya; pero su predecesor, Benedicto XVI había confirmado que la Jornada Mundial de la Juventud se celebraría en Río de Janeiro y que “el Papa” estaría presente, como en todas las Jornadas, aunque el Papa no habría sido él. De este modo, el Papa Francisco retoma el legado de Benedicto XVI, haciendo este viaje. Sucedió algo parecido durante el anterior cambio de pontificado: el primer viaje de Benedicto XVI, siempre para la Jornada Mundial de Juventud, fue también a su tierra, Alemania, concretamente a Colonia, pero la ciudad la había decidido su antecesor, el beato Juan Pablo II”.

“El viaje ya estaba planeado, pero ciertamente el programa, se ha “adaptado”, digamos intensificado y enriquecido, con eventos adicionales. con el cambio de pontificado. El proyecto preparado para Benedicto XVI era más ligero y, en cambio, con el Papa Francisco se han añadido algunas cosas, como por ejemplo, la peregrinación al santuario de Aparecida, la visita a la favela de Varginha (Manguinhos), al hospital de San Francisco de Asís de la Providencia, la reunión con el Comité de Celam. Son actos que no formaban parte del calendario del primer proyecto del viaje, hecho más a medida de Benedicto XVI. El Papa Francisco ha mantenido la duración, es decir del 22 al 29 de julio, que estaba prevista antes del cambio de pontificado, pero ha incluido más actividades; en particular la peregrinación a Aparecida, en un día que, en el borrador precedente, podría haber estado dedicado al descanso”.

“Por supuesto -ha añadido Lombardi- el Santo Padre fue invitado por los obispos organizadores y promotores de la JMJ”, monseñor Orani Tempesta, arzobispo de Río de Janeiro, y el cardenal Damasceno Assis, presidente de la Conferencia Episcopal de Brasil, y naturalmente por la presidenta Dilma Rousseff, que vino al Vaticano “para la inauguración del pontificado y se entrevistó con Francisco al día siguiente invitándolo explícitamente a ir a Brasil. El Papa confirmó inmediatamente, pocos días después de su elección, que habría viajado para la Jornada Mundial de la Juventud, y este hecho ha permitido a la organización acelerar los preparativos”.

BIENAVENTURANZAS DEL PEREGRINO

1. Bienaventurado eres, peregrino, si descubres que el camino te abre los ojos a lo que no se ve.

2. Bienaventurado eres, peregrino, si lo que más te preocupa no es llegar, sino llegar con los otros.

3. Bienaventurado eres, peregrino, cuando contemplas el camino y lo descubres lleno de nombres y de amaneceres.

4. Bienaventurado eres, peregrino, porque has descubierto que el auténtico camino comienza cuando se acaba.

5. Bienaventurado eres, peregrino, si tu mochila se va vaciando de cosas y tu corazón no sabe dónde colgar tantas emociones.

6. Bienaventurado eres, peregrino, si descubres que un paso atrás para ayudar a otro vale más que cien hacia delante sin mirar a tu lado.

7. Bienaventurado eres, peregrino, cuando te faltan palabras para agradecer todo lo que te sorprende en cada recodo del camino.

8. Bienaventurado eres, peregrino, si buscas la verdad y haces de tu camino una vida y de tu vida un camino, en busca de quien es el Camino, la Verdad y la Vida.

9. Bienaventurado eres, peregrino, si en el camino te encuentras contigo mismo y te regalas un tiempo sin prisas para no descuidar la imagen de tu corazón.

10. Bienaventurado eres, peregrino, si descubres que el camino tiene mucho de silencio; y el silencio, de oración; y la oración, de encuentro con el Padre que te espera.

REFLEXIÓN

Posted: 25 Jul 2013 04:30 AM PDT


Hace mucho tiempo existía un enorme árbol de manzanas. Un pequeño niño lo amaba mucho y todos los días jugaba alrededor de él. Trepaba al árbol hasta el tope y él le daba sombra. Él amaba al árbol y el árbol amaba al niño.

Pasó el tiempo y el pequeño niño creció y nunca más volvió a jugar alrededor del enorme árbol. Un día el muchacho regresó al árbol y escuchó que éste le dijo tristemente:
"¿Vienes a jugar conmigo?",
pero el muchacho contesto:
"Ya no soy el niño de antes que jugaba alrededor de enormes árboles. Lo que ahora quiero son juguetes y necesito dinero para comprarlos".

"Lo siento", dijo el árbol, "pero no tengo dinero... Te sugiero que tomes todas mis manzanas y las vendas. De esta manera tú obtendras el dinero para tus juguetes".

El muchacho se sintió muy feliz. Tomó todas las manzanas y obtuvo el dinero y el árbol volvió a ser feliz. Pero el muchacho nunca volvió después de obtener el dinero y el árbol volvió a estar triste.

Tiempo después, el muchacho regresó... el árbol se puso muy feliz y le preguntó:
"¿Vienes a jugar conmigo?"

"No tengo tiempo para jugar. Debo de trabajar para mi familia. Necesito una casa para compartir con mi esposa e hijos. ¿Puedes ayudarme?".
"Lo siento, pero no tengo una casa, en todo caso tú puedes cortar mis ramas y construir tu casa".
El joven cortó todas las ramas del árbol y esto hizo feliz nuevamente al árbol, pero el joven nunca más volvió desde esa vez y el árbol volvió a estar triste y solitario.

Cierto día de un cálido verano, el hombre regresó y el árbol estaba encantado.
"¿Vienes a jugar conmigo?", le preguntó el árbol.
El hombre contestó:
"Estoy triste y volviéndome viejo. Quiero un bote para navegar y descansar. ¿Puedes darme uno?".
El árbol contestó:
"Usa mi tronco para que puedas construir uno y así puedas navegar y ser feliz".
El hombre cortó el tronco y construyó su bote. Luego se fue a navegar por un largo tiempo.

Finalmente regresó después de muchos años y el árbol le dijo:
"Lo siento mucho, pero ya no tengo nada que darte, ni siquiera manzanas".
El hombre replicó:
"No tengo dientes para morder, ni fuerza para escalar... ya estoy viejo".
Entonces el árbol con lágrimas en sus ojos le dijo:
"Realmente no puedo darte nada.... la única cosa que me queda son mis raíces muertas".
Y el hombre contestó:
"Yo no necesito mucho ahora, sólo un lugar para descansar. Estoy tan cansado después de tantos años".
"Bueno", dijo el árbol, "las viejas raíces de un árbol son el mejor lugar para recostarse y descansar.
Ven siéntate conmigo y descansa".
El hombre se sentó junto al árbol y éste, derramó lágrimas de felicidad.

miércoles, 17 de julio de 2013

LOS JÓVENES QUE NUESTRA SOCIEDAD NECESITA


Tengo el blog un poco abandonado el ordenador nos hace jugadas.

Estos días que se prepara la jornada mundial de la juventud en Rio, buen momento para encomendarla, encuentro estas palabras del Papa Francisco, que nos pueden ayudar:

“Necesitamos santos sin velo, sin sotana.
Necesitamos santos de yeans y zapatillas.
Necesitamos santos que vayan al cine, escuchen música y paseen con sus amigos.
Necesitamos santos que coloquen a Dios en primer lugar y que sobresalgan en la universidad.
Necesitamos santos que busquen tiempo cada día para rezar y que sepan enamorarse en la pureza y castidad, o que consagren su castidad.
Necesitamos santos modernos, santos de siglo XXI, con una espiritualidad insertada en nuestro tiempo.
Necesitamos santos comprometidos con los pobres y los necesarios cambios sociales.
Necesitamos santos que vivan en el mundo, se santifiquen en el mundo y no tengan miedo de vivir en el mundo.Necesitamos santos que tomen Coca-Cola y coman hot-dogs, que sean internautas, que escuchen iPod. Necesitamos santos que amen la Eucaristía, y no tengan vergüenza de tomar una cerveza o comer pizza el fin de semana con los amigos.
Necesitamos santos que estén en el mundo y sepan saborear las cosas puras y buenas del mundo pero sin ser mundanos"



Cómo ser un super apóstol

Posted: 14 Jul 2013 02:47 PM PDT


Está a punto de comenzar en Río de Janeiro la Jornada Mundial de la Juventud, a finales de este mes de julio. El lema es "Id y haced discípulos en todas las naciones."
Rezando vamos, inspirándose en esa llamada, nos propone para estos días una oración especial. Una invitación a acoger ese envío y a ponernos, cada uno en nuestras circunstancias, manos a la obra. Una ocasión de rezar, con toda la Iglesia, para seguir haciendo fecunda esa misión que el mismo Jesús da a sus discípulos de todos los tiempos. 

Como buenos Discípulos de Jesús, tenemos el altísimo gusto de presentarles a nuestros hermanos Samir Fajardo y Rosa Huapaya, quienes representan a nuestra Parroquia, Sagrados Corazones de Jesús y María, de Carmen de la Legua - Reynoso. En la Jornada Mundial de la Juventud en Brasil. Ellos van a adquirir una riquísima experiencia participando en esta Jornada, con la compañía de nuestro Papa Francisco I.

¡Envíanos Señor!

Soy católico “a mi manera”

Soy católico, pero no voy a misa. En realidad creo en Dios, pero no en la Iglesia. Las respuestas que seguramente recibirás, con algunas variantes, irán en esta dirección. ¿Que encierra este "soy católico"? Probablemente un sentimiento de pertenencia, que vendrá por el Bautismo o la primera Comunión, o por el vínculo con algún colegio católico, nunca falta tampoco, quien guarda un grato recuerdo de su paso en la niñez o juventud, por ser como  lo llama, un "ayudante en la misa".
Soy católico a mi manera. Esta frase, no solo no tiene ningún fundamento, sino que en sí misma es contradictoria. Utilizarla es afirmar y negar una realidad al mismo tiempo, lo que resulta imposible. Quien hace esta afirmación, desconoce el carácter de revelación que tiene la religión cristiana. Las verdades reveladas no son realidades que se nos presentan "a la carta", para que cada uno, como en un restaurante, vaya eligiendo, por un lado las que más le agradan y por el otro, rechazando las que le desagradan. La fe católica tiene su fundamento en la revelación de Dios.
Y aquí tenemos, unas características muy concretas:
Dios se manifiesta dándose a conocer. Esto supone un marco posible de comprensión por parte del hombre. El hombre puede entrar en esta relación con Dios por ser criatura suya, y haber sido dotado por Él, de la potencialidad necesaria para vivir esta comunicación. También esta afirmación supone una comprensión de Dios, muy concreta, que manifiesta su voluntad de darse a conocer. Por otra parte, se desprende que el hombre no puede alcanzar el conocimiento de lo que Dios es en sí, si éste no se lo revela. Podemos por la razón afirmar la existencia de Dios y sus atributos. Como dice san Pablo a los romanos: podemos elevarnos por medio de las criaturas al Creador. Ellas manifiestan al hombre una acción superior. Pero, quién es Él en sí, únicamente podemos alcanzarlo por la Revelación. Una acción que tiene su iniciativa en Dios.
Dios nos da a conocer quién es Él y cual es su plan de salvación. Esta acción de Dios, se realiza progresivamente y alcanza su "plenitud" en Jesucristo, verdadero Dios y verdadero hombre. Con Él,  Dios lleva a término su Revelación. Jesucristo es la Palabra definitiva de Dios a los hombres. Ya no es un mensaje que envía a través de un mensajero, sea ángel, profeta o un rey, ahora el mensaje y su emisario son uno y el mismo. Este es Evangelio, es decir, buena noticia de Jesucristo el Hijo de Dios. Toda su existencia es Palabra de Dios, que concreta en la "carne humana" el misterio más insondable que se denomina "Dios con nosotros". A los pastores, se les anuncia un signo y se les comunica una "gran alegría", ha nacido el salvador. Se concreta en la carne el anuncio esperado, y de modo inaudito la realidad  limitada ahora es habitada por Dios.
La vida de Jesús es la clave que abre las puertas de la existencia humana. Sus palabras y obras, son y siempre serán, sobre la existencia humana la Verdad ¿Quiénes conservaron el tesoro de sus enseñanzas y las verdades encerradas en los acontecimientos de su vida?¿Quiso Él guardar, de algún modo concreto, el tesoro de su paso en medio nuestro?
Sí, la Iglesia nace de este deseo de Jesús por comunicar esas verdades a todas las generaciones, y no solo intelectualmente, sino celebrándolas en la fe. Luego de la Pascua, el testimonio ocular de los testigos, es iluminado por la acción del Espíritu Santo que los conduce a la verdad plena. De allí, que el Espíritu Santo  y los obispos, como sucesores de los apóstoles, garantizan en una única acción, la proclamación de esta verdad plena a todos los hombres de todos los tiempos. Esta acción ininterrumpida, fruto de la fidelidad de Dios, es obra del Espíritu Santo en la Iglesia. Como dice san Pablo: Dios quiere que todos los hombres se salven y lleguen al conocimiento de la Verdad.
Soy católico a mi manera. Una afirmación tan sencilla, encierra errores muy importantes que no debemos soslayar. No somos un grupo de amigos que con el transcurso del tiempo, interpretamos lo que Jesús nos enseñó, y le vamos dando un toque más liberal o pragmático. Tampoco nuestro credo debe ser considerado, como la "carta de un restaurante", que nos permite seleccionar lo que más no apetece.. No hay católicos a su manera. Hay católicos prácticos, y otros que no lo son. Han recibido el Bautismo, y esto tiene gran importancia, pero lamentablemente ha quedado en una foto o en alguna filmación…
AUTOR: Diác. Jorge Novoa